Pocas cosas me hacen disfrutar tanto en la cocina como volver a las recetas tradicionales. La cocina de siempre me relaja porque no necesito ninguna guía ni seguir pasos que no me salen instintivamente. La propia receta te va pidiendo lo que necesita, más líquido, subir el fuego o bajarlo un poco, algo verde... al fin y al cabo es la cocina de n...