Un día cualquiera, en los negros y escarpados roqueos de la costa malagueña, cuando baja la marea y deja al descubierto ése mundo maravilloso que puedo ver cuando buceo y que puedo observar con respeto y detenimiento caminando sobre las resbaladizas piedras. Pepinos de mar en los surcos, tomates adheridos con fuerza a las rocas entre lapas,...
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